Manual de selvicultura del
Pino de Oregón
Índice
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5. CUIDADOS POSTERIORES DE LA PLANTACIÓN

Protectores individuales de la planta

Protectores individuales de la planta

Las plantas de abeto Douglas sufren con frecuencia daños al ser recomidas por ganado o animales silvestres. Muy frecuentemente esos daños provienen del corzo, que recome los brotes, ratones de campo, que causan daños en el tallo con frecuencia y conejo, que come brotes y produce daños en el tallo. El mejor procedimiento para proteger una plantación es el uso de protectores individuales, si bien el elevado precio de estos aconseja emplearlos únicamente en el caso de que sean pervisibles daños intensos, ya que si el porcentaje de plantas que sufre daños es pequeño el futuro de la plantación no queda comprometido. La instalación de los protectores se debe realizar nada más terminar la plantación.

Existen diferentes tipos de protectores individuales que se comercializan para repoblación forestal. Pueden ser da malla metálica, de malla de plástico o de plástico, y de diferentes alturas según la talla del animal que puede causar daños. Para el caso de ratones no deben emplearse las mallas, ya que su pequeño tamaño les permite un acceso fácil, y la altura La altura mínima debe ser de 60 cm para proteger de daños frente a conejo y de 1,20 metros cuando se trata de corzo.Existen protectores de plástico biodegradable, que se emplean cuando no se tiene interés de recogerlos para emplearlos de nuevo. En general todos los protectores comerciales se caracterizan por un precio bastante elevado, y si bien producen buenos resultados de protección y en algún caso parece acelerar el crecimiento en altura de la planta, el excesivo ahilamiento de la planta puede provocar desequilibrios y el acamado de la planta.

Es de gran importancia usar un tutor sólido y correctamente instalado. De lo contrario ante condiciones climatológicas adversas puede caer arrastrando todo el protector y la planta consigo.

Desbroces posteriores a la plantación

El pino de Oregón puede considerarse como una especie muy sensible a la competencia de la vegetación, y especialmente de las herbáceas. De hecho, estas últimas pueden dar lugar a una competencia tan intensa por el agua y nutrientes que la plantación se malogra totalmente.

Detalle y aspecto general de una ladera con instalación de protectores individuales.

Foto 15. Detalle y aspecto general de una ladera con instalación de protectores individuales.

Desbroces químicos

En el caso de vegetación herbácea los desbroces más efectivos son los químicos, empleando herbicidas. Puede darse un tratamiento a base de glifosato, en cuyo caso se deben proteger las plantas para que el producto no entre en contacto directo con ellas (aplicación dirigida). Las dosis normalmente empleadas son de 3 litros de producto comercial que contenga 360 gr/l de glifosato por hectárea tratada, aplicando en fajas o bien a hecho. Los tratamientos para mejorar la efectividad, deben darse con las herbáceas durante la floración de las especies anuales, cuando la planta tiene agotados sus recursos y rebrota con dificultad, o en la bajada de savia en otoño (perennes) a fin de eliminar cepas o rizomas.

Puede aplicarse asimismo un herbicida selectivo, que afecte a las herbáceas pero no a las plantas de pino de Oregón. En este caso se aplica directamente sin necesidad de protección una dosis de 5 litros de producto comercial a base de hexazianona y con concentración de 240 gr/l por hectárea tratada, siempre que la planta no haya brotado aún.La época más efectiva es la primavera temprana. El herbicida se aplica siguiendo las líneas de plantación.

Para realizar una aplicación dirigida es útil emplear capuchones de plástico con los que se cubren las plantas, tras lo cual se aplica, normalmente de forma manual, con una mochila, el herbicida.

Para pequeñas superficies el equipo normalmente empleado son los pulverizadores de mochila. En esta última deberá mezclarse el herbicida con agua, lo que recibe el nombre de caldo. Lo normal, para conseguir una buena distribución del herbicida, es emplear de 300 a 500 litros de caldo por hectárea tratada. Para el caso del tratamiento con hexazianona, como deben aplicarse 5 litros de producto comercial por hectárea tratada, el agua y el herbicida habrán de mezclarse en la mochila en una proporción media de 80:1.

Aplicación manual de herbicida con protección de las plantas.

Figura 12. Aplicación manual de herbicida con protección de las plantas.

Para superficies más extensas podrá emplearse tractor de cuba de distribución de herbicida.

La colocación de plataformas de protección puede evitar la realización de desbroces cuando la vegetación es herbácea. Frecuentemente son de tablero aglomerado. Su precio es sin embargo elevado, por lo que solo se justificaría con densidades reducidas.

Desbroce mecanizado

En el caso de que la vegetación existente sea matorral, los desbroces se realizarán preferentemente de forma mecanizada, siguiendo las bandas que quedan entre dos filas de plantación y usando un apero desbrozador-triturador con tractor de cadenas. A lo largo de las filas de plantas queda el matorral más próximo a estas, ya que el apero solo se habrá parado a una distancia prudencial para no dañar las plantas. Es necesario por tanto una terminación manual alrededor de las plantas, usando motodesbrozadora o podón.

Serán necesarios al menos dos desbroces de este tipo, antes de que las copas de los pinos de Oregón estén suficientemente desarrollados como para controlar, debido a su densa cubierta, el matorral heliófilo.

Ha de tenerse presente que el crecimiento el altura de Pseudotduga menziesii es lento los primeros años, por lo que no sería sorprendente que tras cinco años los árboles tengan una talla de alrededor de 1,5 metros, lo que para el pino del país o el pino insigne puede considerarse una altura escasa. Dependiendo de la calidad del suelo y del procedimiento de repoblación, a partir del 5º ó 6º año las metidas anuales deberían ser ya muy importantes, de 70 cm a más de 1 metro. El riesgo de que las plantas queden ahogadas por el matorral si no se hacen desbroces es por tanto evidente.

En el momento en que el pino de Oregón cierra copas dejando las ramas vivas aisladas del suelo, la sombra que genera es tal que impide el desarrollo del matorral, el suelo normalmente está cubierto por una capa delgada de acículas, creándose un ambiente poco propenso a los incendios. No son necesarios entonces más desbroces

Desbroce mecanizado con desbrozadora de cadenas entre líneas. Monte de San Pedro de Rocas. Ourense.

Foto 17. Desbroce mecanizado con desbrozadora de cadenas entre líneas. Monte de San Pedro de Rocas. Ourense.

Desbroce mecanizado con tractor agrícola dotado de desbrozadora de cadenas. En las proximidades de las líneas de planta la terminación del trabajo ha de ser manual.

Figura 13. Desbroce mecanizado con tractor agrícola dotado de desbrozadora de cadenas. En las proximidades de las líneas de planta la terminación del trabajo ha de ser manual.

Desbroce manual

Se realizan con motodesbrozadora u hoz, normalmente de forma puntual y alrededor de la planta, en una superficie de 1 m2.

Tallas de formación

Anualmente, el pino de Oregón presenta una o varias metidas o crecimientos. Se le llama policiclismo a la facultad de brotar en varias ocasiones durante la misma temporada de crecimiento. La existencia de varias metidas depende de las condiciones meteorológicas del año y de la procedencia usada en la plantación. En general, el policiclismo merece una valoración negativa, ya que da lugar a una mayor ramosidad y a la formación de horquillas o dobles guías en las plantas.

Existen otras causas para la formación de horquillas, siendo este una carácter frecuente en las plantas de pino de Oregón. Si las horquillas permanecen, se forma una bifurcación del tronco principal el árbol, lo que no interesa por varios motivos:

a).- Reducción muy importante del diámetro a partir de la bifurcación.

b).- La zona de bifurcación es muy propensa a roturas por la acción del viento.

c).- La existencia de la bifurcación obliga a trocear el tronco considerando su existencia.

Los árboles bifurcados deben ser eliminados durante los clareos y las claras, por lo que es admisible la presencia de un cierto porcentaje de ellos. Sin embargo, si el porcentaje es elevado o la plantación tiene densidad reducida será interesante realizar una talla de formación, cortando una de las guías desde la base. Convendrá hacerlo lo antes posible, para que el tallo cortado no haya alcanzado excesivo diámetro. Podrá emplearse una tijera de una o dos manos si la plata tiene poca talla; en caso contrario habrá que emplear tijeras montadas sobre pértiga y accionadas por cordel. La guía que se deja recupera con facilidad la dominancia y se formará un único y recto tallo principal.

Planta bifurcada antes de tallar Planta bifurcada después de tallar

Fotos 18 y 19. Tallas de formación. Planta bifurcada antes y después de tallar.

Puede aprovecharse para, además de deshorquillas, cortar alguna rama que adquiere excesivo vigor o demasiada verticalidad. Si los tallos cortados tienen poco diámetro (menos de 2 cm) podrá actuarse en cualquier época del año. En caso contrario será preferible esperar al paro vegetativo.

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